¡Hola! quiero contarles cómo empezó la pesca en mi vida. Desde chica, con mi familia, viajábamos a San Miguel del Monte a 110 km de Capital Federal, donde nos encontrábamos con una laguna increíble. Era cosa típica, que llegaban los viernes, las cañas en mano y desde la mañana temprano lo único que hacíamos era pescar, algo que todavía hoy sigue muy presente entre nosotros.

Así lo pesqué: el surubí atigrado de Esquina
Un día conocí a Gilberto Iroz un guía de pesca y alquiler de botes que se encuentra entre la laguna de Monte y Las perdices, en el sector de la compuerta. El día que pesqué las "Taralilas" como se les suele decir en al zona, fue una jornada ideal para esa pesca, ya que el clima acompañó con muy buena temperatura y viento nulo. El lugar de pesca fue cuidadosamente elegido entre las dos lagunas, donde existe una pequeña corredera de agua y suele ser un comedero de la especie.

Un surubí de Esquina

Gigantes del Uruguay
En este caso pescamos con mojarra, filet de carpa o dientudo, pero también con artificiales. El pique fue suave pero firme, cuándo empecé a verla no lo podía creer, tenía más de 40 cm y fue rápidamente devuelta al agua, ya que nuestro guía tiene esa política. Gracias Weekend por darme este espacio para compartir esta experiencia que me trajo ¡tanta alegría! Las fotos lo dicen todo...

Dorado del río Corrientes
Viviana Beatriz Rabano

Matungos de San Luis

Coloso de Punta Ñaró

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