Escapadas a pocos kilómetros de CABA: 3 destinos con buen pique

Pensando en el aficionado que gusta de pescar pejerreyes en las lagunas bonaerenses, el espectro de opciones se ha achicado notoriamente en relación a años anteriores, aunque la llegada del agua va permitiendo ilusionarse con la recuperación de muchos de ellos. Hay ámbitos que han pasado al olvido y otros que ya muestran atisbos de recuperación. En otra punta podemos ubicar a espejos que mantienen sus laureles. Ellos se vieron beneficiados, en su mayoría, por mantener constante un importante caudal que lo favoreció para no tener mortandades y asegurar una excelente población del pejerrey. En ese contexto, entre otros, sobresalen un puñado de pesqueros que hoy aparecen entre los predilectos para el cañófilo. 

La Boca

A alrededor de 180 km, La Boca es un ámbito de unas 1.200 hectáreas cubiertas de agua y que, gracias a las constantes lluvias, está en un muy buen nivel, incluso en estos momentos con un ingreso de agua a través de los arroyos Camarón y San Miguel. Ubicada entre la localidad de Pila y Castelli, también conocida como San Lorenzo, está muy bien poblado y nos brinda la posibilidad de concretar muy buenas faenas independientemente a las condiciones climáticas.

Hay momentos en que salen ejemplares de 35 a 40 cm en forma pareja, y en otros, hay que ir seleccionando las capturas para irse con una cuota destacada. Los resultados se dan a flote, con aparejos de dos o tres boyas, esto de acuerdo al gusto del pescador. Algunos intentan con paternóster, aunque no rinde de la misma manera que un aparejo flotero que garetea y arrastra la carnada. Hay que estar atentos al viento, si sopla fuerte, entre 30 y 40 km/h, las chances se pueden dar con brazoladas de 40 a 60 cm, pero si nos encontramos con jornadas con menos de 20 km/h, la pesca se hace exclusivamente abajo, al ras del fondo. La última semana, el peje de calidad, ese que supera los 400 a 500 g, se dio comiendo abajo en la línea del metro a 1,60 m, casi al barro, dependiendo la zona a pescar y anclado. A la hora de encarnar, la mojarra rindió, pero no hay que descartar el filet de dientudo.

• Desde La Boca opera Gustavo Toffani (Tel.: 02241 497094), uno de los referentes entre otros guías altamente recomendados.

Altos Verdes

Este espejo se alimenta de los desbordes del río Salado que llegan por el arroyo San Miguel. La laguna se encuentra en el partido de Castelli y desde Capital Federal se accede por Autovía 2 primero y, luego, a través de un camino de tierra que sale tras pasar un famoso parador. Allí un cartel indica que, para el camping La Orfilia ubicado al borde del espejo, restan 17 km.  Ingresando por la estancia La Orfilia hubo buenos piques de pejerreyes embarcados, aunque sintió las heladas como la mayoría. Las mejores faenas se dan mejor con viento, con un pique interesante y portes muy mezclados, chicos, medianos y algunos de 500 g para arriba. Como toda la zona, está con buen nivel de agua y viene creciendo su nivel. Un dato a tener en cuenta es el acceso, se complica con condiciones desapacibles.

• Pesquero La Orfila. Tel.: (02241) 15685143. Hay alquiler de botes.

San Miguel del Monte

Gilberto Iroz, quién alquila embarcaciones en inmediaciones a la compuerta con Las Perdices es la voz ineludible que tenemos a la hora de hablar de esta localidad. A sólo 115 km de CABA, Monte atraviesa un gran momento, a pesar de que la semana anterior llovieron casi 100 mm. Un nivel alto, ya que el agua está a la misma altura tanto en Las Perdices como en la propia Monte. A pesar de ello, sigue rindiendo muy firme, aunque, claro está, cuesta más y hacen la diferencia las buenas cañas. Por los últimos días, el peje comió más al barro, tanto con aparejos de dos boyas que pesquen entre 2 y 2,40 m, como con páter. En cuanto a carnada, en estos momentos, la mojarra viva es la carnada más rendidora, pero cuando se afirmen las heladas como pasa todos los años, el propio camarón de la laguna se va a llevar todas las palmas. Boyas chicas, hay que ser sutil. Son pejes robustos y peleadores, con portes que pueden llegar a los 40 cm. De orilla la chance de dar con pejes a fondo, brazoladas largas, con equipos de lance. 

El fuerte de la laguna en este momento es la pesca desde embarcaciones, pero la chance de orilla siempre está gracias al camino de circunvalación íntegramente asfaltado que permite que el pescador orillero puede pegarse la vuelta y pescar donde quiera, siendo buenos sitios la Boca del Totoral, las zonas de Casa Verde o Amarilla sobre la propia ciudad, o algunas abras entre juncos por la compuerta que a une con Las Perdices, todos sitios que se vieron favorecidos por el aumento del caudal. 

• Referente en la zona: Gilberto Iroz (Tel.: 2226-448809) que alquila embarcaciones en las inmediaciones de la compuerta.